Malezas, plagas y enfermedades
Tratamientos del suelo son útiles donde gusanos hayan causado problemas.
Híbridos manipulados biológicamente (GMOs por sus siglas en inglés) y que producen una toxina de insecticida por aplicación de un gene de la bacteria Bacillus thuringensis (BT) provee una manera moderna para combatir el piral europeo de maíz y algunos otros gusanos que atacan el tallo y las raíces. Pulgas, saltamontes, escarabajos y trips, también son plagas comunes en el maíz, sobre todo en climas más cálidos.
Enfermedades del maíz se afectan mucho de las condiciones climáticas y son difíciles de predecir. Todas las enfermedades no causan pérdidas económicas y en maíz para grano las hojas que tienen más importancia son las que están de la mazorca para arriba, cualquier pérdida de área fotosintética en estas hojas reducirá el rendimiento final.
En casos severos de ataques de enfermedades como Cercospora zeae maydis, las plantas se vuelven más dispuestos al encamado como sacan todos los nutrientes del tallo para dedicarlos a llenar los granos, y así adelantando la maduración. En regiones más templadas, enfermedades como Kabatiella zeae, que aparece en las fases avanzadas del cultivo, pueden reducir el rendimiento en maíz forrajero.